Comunicado. La OMS presentó una nueva iniciativa para instar a los países a aumentar los precios reales del tabaco, el alcohol y las bebidas azucaradas en al menos 50% de aquí a 2035 a través de impuestos para la salud, en una medida concebida para frenar las enfermedades crónicas y generar ingresos públicos cruciales. La Iniciativa “3 para el 35” llega en un momento en que los sistemas de salud están sometidos a una enorme presión debido al aumento de las enfermedades no transmisibles (ENT), el encogimiento de la ayuda al desarrollo y la creciente deuda pública.
“Los impuestos para la salud son una de las herramientas más eficaces que tenemos. Reducen el consumo de productos nocivos y generan ingresos que los gobiernos pueden reinvertir en atención de salud, educación y protección social. Es el momento de pasar a la acción”, señaló Jeremy Farrar, Subdirector General, Promoción de la Salud y Prevención y Control de Enfermedades, en la OMS.
La iniciativa tiene un objetivo ambicioso pero factible: recaudar un bdd en los próximos 10 años. Entre 2012 y 2022, casi 140 países aumentaron los impuestos sobre el tabaco y se logró incrementar los precios reales en más del 50% de media, lo que demuestra que un cambio a gran escala es posible.
Desde Colombia hasta Sudáfrica, los gobiernos que han introducido impuestos para la salud han visto reducido el consumo y han incrementado los ingresos. Sin embargo, muchos países siguen ofreciendo incentivos fiscales a industrias poco saludables, como la del tabaco. Es más, los acuerdos de inversión a largo plazo con la industria que ponen cortapisas al incremento de los impuestos sobre el tabaco pueden socavar aún más los objetivos nacionales de salud. La OMS alienta a los gobiernos a que examinen y eviten esas exenciones a fin de apoyar el control eficaz del tabaco y proteger la salud pública.
Una colaboración estrecha es crucial para que la Iniciativa “3 para el 35” alcance los resultados deseados.
La iniciativa, liderada por la OMS, reúne a un potente grupo de asociados mundiales para ayudar a los países a poner en práctica los impuestos para la salud. Son organizaciones que ofrecen una combinación de saber hacer, asesoramiento sobre políticas y experiencia en el mundo real. Al trabajar juntos, su objetivo es dar a conocer los beneficios de los impuestos para la salud y apoyar los esfuerzos en el ámbito nacional.