Comunicado. De acuerdo con estudios recientes la curcumina puede inhibir la replicación del SARS-CoV. Lo que confirma que algunos nutrientes naturales pueden funcionar como medicamentos para el organismo, y esto es valorado si se tiene en cuenta que los virus y las bacterias que nos enferman desarrollan resistencia a los fármacos, pero el organismo siempre aprovecha lo que naturalmente le hace bien.
La curcumina se usa desde la antigüedad como colorante en varias tradiciones culinarias, pero actualmente la investigación científica revela sus propiedades antimicrobianas y antivirales.
Amelia Aldana Mendoza, médico del laboratorio especializado en micro y macro nutrición Ysonut, indica que algunas de los beneficios de este componente son: su amplio abanico de usos, es antibacteriana y antimicótica, forma sinergias y, recientemente, se dio a conocer que ayuda a inhibir el SARS-CoV.
En laboratorio se verificó que la curcumina puede inhibir la replicación del SARS-CoV, y que en células Vero E6 (un tipo muy común de tejidos cultivados para experimentación) inhibe el efecto citopatogénico causado por el virus. Se han tratado casos leves de Covid-19 con 2 a 4 gramos diarios de curcumina (combinada con vitamina C y zinc) por un periodo prolongado, más un antibiótico (azitromicina) durante 3 días. En el 99.9% de los casos tuvieron remisión.
Cabe mencionar que, a finales de 2020, un estudio preclínico realizado por el Instituto de Química de la UNAM propone el uso de medicamentos antivirales o antiinflamatorios disponibles a precios accesibles en el mercado, así como el extracto de cúrcuma, como opciones en el tratamiento temprano de Covid-19.
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